De no pensarlo olvidamos casi por completo que el cine mayoritario en nuestras vidas, el de Hollywood, se concibe y lleva a cabo en inglés (o inglés norteamericano si se prefiere).
Tenemos gente capaz de discurrir cosas como: «Eh, vamos a observar el efecto que produce una gota de leche al impactar en la superficie de una taza de cafe».