Crónicas del Excalibur
Anoche, casi por casualidad, tuve el placer de ir con unos amigos/as a tomar unas copas a uno de los templos heavys por excelencia de nuestro querido Madrid: Excalibur.
La verdad es que ya era bastante tarde (4:00h. de la mañana) e íbamos todos un poco «contentillos». La idea surgió poco antes bebiendo algo en la zona de Vallecas; aunque era muy tarde me apetecía mucho escuchar Heavy.

Así que después de insistir un poquito convencí a Raquel, Orlando y compañía.
Qué deciros… flipé bastante. A medida que nos acercábamos al Excalibur no paraba de subir por las calles aledañas un montón de gente con atuendos de cuero negro.
El garito, bastante grande, tiene dos plantas y en el centro una pista de baile con la cabina del Disk-jockey.
Me llamó la atención que los hombres teníamos que pagar entrada (con derecho a consumición) y las chicas no. La entrada no es cara para lo que es hoy en día Madrid (8€) y lo original del tema es que con ella te podías tomar no solo una copa, sino también un mini de cerveza o de calimocho.
La estética se correspondía mayoritariamente al Heavy-clásico, aunque también encontrabas tipos con aspecto Marilyn Manson, gótico o gente como yo, que no iba vestido de nada en particular.
Encontrabas desde cincuentones pirados toda la vida por el Heavy hasta chavales/as de 20 años. Me sorprendió gratamente la cantidad de mujeres guapas que había. Eso sí, casi todas de negro, tanto ropa como labios y uñas (también algunas «lobas» rondando los cuarenta que no paraban de mirarte con aviesas intenciones).

Respecto al ambiente en general, solo puedo decir que había muchísimo buen rollo. De hecho cuando nos fuimos a la pista a bailar se nos acercaron un par de chavales a ayudarnos a tocar la Air Guitar. Todo el mundo parecía bastante pacifico y majete y en ningún momento vi caras raras por ir vestido yo con unos vaqueros, una camiseta, gafas y el pelo corto.
Respecto a la música: Dio, WASP, Sangre Azul… Buen heavy aunque algo machacón en algunos momentos de la noche.
Si os gusta el heavy aquí pasaréis una noche divertida, recomiendo encarecidamente el sitio.
todo lo que dices de la sala guay, sí, llevas razón. pero no sé si no te fijaste o ese día tuviste suerte. tambien se juntan allí todos los «restos» de la noche madrileña, también un montón de poníos de ojos besuguiles, también coches llenos de peña metiéndose tiros… bueno, y por supuesto gente con ganas de bronca. por lo demás, seguiré sumando años allí.
salud